Nueva ley de nietos ciudadanía española por descendencia
La nacionalidad española está regulada en el Código Civil español y en el Real Decreto 1004/2015, de 6 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento del procedimiento para la adquisición de la nacionalidad española por residencia.
La solicitud puede presentarse en cualquier momento. Si el solicitante vive en España la solicitud se puede presentar por internet, pero si vive en el extranjero la solicitud debe presentarse en el consulado español.
El último paso de la nacionalidad española, tras la aprobación de la solicitud, es la JURA de la Constitución y la Monarquía españolas. Entonces, después de un par de meses podrás recoger tu certificado de nacimiento español y proceder a la expedición de tu pasaporte y DNI españoles.
Según la Ley 1004/2015, aprobada el 7 de noviembre de 2015, el solicitante de la Ciudadanía Española por Residencia debe superar el examen DELE A2 ‘s (examen de lengua) y CCSE (prueba cultural). Ambos exámenes son organizados por el Instituto Cervantes. Hay algunos casos en los que los solicitantes no necesitan pasar estos exámenes. Consulte con nuestros abogados expertos en Madrid o Barcelona para obtener más información.
Ciudadanía española para América Latina
Todas las vías de naturalización conducen a la inscripción del interesado en el Registro Civil español. La inscripción da derecho a la obtención del documento nacional de identidad y del pasaporte españoles.
Así, cualquier persona que esté o haya estado bajo la patria potestad de un español, o cuya madre o padre haya sido español y haya nacido en España, o los adoptados mayores de 18 años, pueden optar a la nacionalidad española.
La Ley 52/2007, de 26 de diciembre, conocida como Ley de la Memoria Histórica, establece un procedimiento especial para la adquisición de la nacionalidad española por opción, en beneficio de los descendientes de españoles exiliados durante la Guerra Civil y la dictadura.
El interesado deberá acreditar la concurrencia de circunstancias excepcionales que justifiquen la concesión de la nacionalidad. La valoración de las circunstancias excepcionales alegadas no está sujeta a las normas generales del procedimiento administrativo y se realiza caso por caso. Las circunstancias excepcionales en las que se puede basar una solicitud son muy variadas: motivos relacionados con la cultura, el deporte, la ciencia, la solidaridad, etc.
Ley de nietos española
El derecho de la nacionalidad española se refiere a todas las leyes de España relativas a la nacionalidad. El artículo 11 del Título Primero de la Constitución Española se refiere a la nacionalidad española y establece que una ley propia regulará su adquisición y pérdida[1] Esta ley propia es el Código Civil español. La nacionalidad española se adquiere, en general, por el principio de ius sanguinis (ascendencia), con una disposición adicional limitada para su adquisición por ius soli (lugar de nacimiento).
Tradicionalmente, las consideraciones sobre la nacionalidad española habían sido reguladas (sucesivamente) por artículos constitucionales: el artículo 5º de la Constitución de Cádiz de 1812, el artículo 1º de la Constitución de 1837, el artículo 1º de la Constitución de 1845, el artículo 2º de la Constitución no promulgada de 1856, el artículo 1º de la Constitución de 1869 y el artículo 1º de la Constitución de 1876[2].
El texto original del Código Civil de 1889 fue modificado parcial o totalmente por los artículos 23º y 24º de la Constitución de 1931 (que abrió una vía para explorar acuerdos de doble nacionalidad con países iberoamericanos), y las leyes de 1954, 1975, 1982, 1990 y 2002[4].
Cómo conseguir un pasaporte español en el Reino Unido
El tiempo de espera ha sido eterno y las negociaciones entre el Gobierno español y sus socios en el Parlamento han sido largas, polémicas y agotadoras. Tanto es así que el proceso parecía haber encallado hace meses. Sin embargo, la Ley de Nietos ya es una realidad. Con ella, quienes sean hijos o nietos de españoles podrán solicitar la nacionalidad española, aunque sus antepasados la hayan perdido por motivos políticos, ideológicos, de creencias o de orientación e identidad sexual.
La Ley de Memoria Democrática, como se llama oficialmente, viene a saldar un poco más las deudas que España tiene con su pasado más reciente. Sus objetivos son claros. La recuperación, salvaguarda y difusión de esa memoria, tan maltratada por 40 años de dictadura. Y, por extensión, “promover la cohesión y la solidaridad entre las distintas generaciones en torno a los principios, valores y libertades constitucionales”.
El pasado mes de junio, el texto de la nueva ley, impulsada por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), fue aprobado por el Congreso de los Diputados, pero necesitaba el visto bueno del Senado, que ahora se ha cumplido. Ahora se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), y se ha convertido oficialmente en ley.