Cómo desarrollar la psicomotricidad
El examen psicomotor de EMT avanzado consiste en diez habilidades presentadas en un formato de escenario. Todas las destrezas han sido desarrolladas de acuerdo con los Estándares Nacionales de Educación EMS del Departamento de Transporte de los Estados Unidos (EMT y/o AEMT), las Guías de la Asociación Americana del Corazón para RCP y ECC, y el Protocolo Nacional de Triaje de Trauma del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos.
El proceso de examen psicomotor es una verificación formal de las habilidades y conocimientos “prácticos” del candidato. Aparte de aprobar o suspender, los candidatos no reciben información específica sobre su rendimiento en el examen.
Los candidatos tienen derecho a volver a examinarse de cuatro o menos habilidades cuando realizan un intento completo del examen psicomotor. Los candidatos tienen derecho a dos intentos de repetición de las cuatro o menos destrezas suspendidas. Si se ofrece, sólo se puede realizar un intento de repetición en el mismo día. El fracaso de cualquier destreza en el segundo intento de repetición constituye un fracaso total del examen psicomotor. Los candidatos que suspendan cinco o más destrezas habrán suspendido todo el examen psicomotor.
¿Cuáles son los ejemplos de psicomotricidad?
Ejemplos de habilidades psicomotrices son cualquier cosa que implique la coordinación mano-ojo. Esto incluye utilizar un taco de billar para golpear una bola, escribir a máquina, lanzar dardos, dar patadas a un balón de fútbol, conducir un vehículo y escribir una carta.
¿Qué es la psicomotricidad?
La psicomotricidad representa las actividades orientadas principalmente al movimiento. En la enseñanza, se hace hincapié en este componente de movimiento, aunque en última instancia, en la práctica, el rendimiento requiere una integración de conocimientos y valores relacionados.
¿Qué es la psicomotricidad educativa?
La psicomotricidad puede definirse como aquellas habilidades y destrezas que requieren un componente físico. Más que utilizar la mente para pensar (cognitivo) o reflexionar (metacognitivo), o nuestra capacidad de hablar y observar para desarrollar habilidades sociales (afectivas, interpersonales), son cosas que hacemos físicamente.
Desarrollo psicomotor
El aprendizaje psicomotor es la relación entre las funciones cognitivas y el movimiento físico. El aprendizaje psicomotor se demuestra mediante habilidades físicas como el movimiento, la coordinación, la manipulación, la destreza, la gracia, la fuerza y la velocidad, acciones que demuestran la motricidad fina o gruesa, como el uso de instrumentos o herramientas de precisión y la marcha. Los deportes y la danza son los ámbitos más ricos en psicomotricidad gruesa.
Los ejemplos conductuales incluyen conducir un coche, lanzar una pelota y tocar un instrumento musical. En la investigación sobre el aprendizaje psicomotor, se presta atención al aprendizaje de la actividad coordinada en la que intervienen los brazos, las manos, los dedos y los pies, mientras que no se hace hincapié en los procesos verbales[1].
Según el modelo de tres etapas de Paul Fitts y Michael Posner, en el aprendizaje de la psicomotricidad, los individuos progresan a través de las etapas cognitiva, asociativa y autonómica[2] La etapa cognitiva está marcada por movimientos torpes y lentos que el alumno intenta controlar. El alumno tiene que pensar en cada movimiento antes de intentarlo. En la etapa asociativa, el alumno pasa menos tiempo pensando en cada detalle, pero los movimientos todavía no son una parte permanente del cerebro. En la etapa autónoma, el alumno puede perfeccionar la habilidad mediante la práctica, pero ya no necesita pensar en el movimiento[3].
Qué es la psicomotricidad
“¿Por qué tengo que preocuparme por las habilidades manuales? Yo enseño historia/francés/matemáticas…”. Mi respuesta es sencilla. ¿Qué herramientas se utilizan en el ejercicio de su disciplina? ¿No se espera que los estudiantes, a medida que avanzan en sus estudios, adquieran un grado de competencia cada vez mayor en el uso de estas herramientas?
La psicomotricidad puede definirse como aquellas habilidades y destrezas que requieren un componente físico. Más que utilizar la mente para pensar (cognitivo) o reflexionar (metacognitivo), o nuestra capacidad de hablar y observar para desarrollar habilidades sociales (afectivas, interpersonales), son cosas que hacemos físicamente. Estas habilidades requieren cierto grado de destreza, flexibilidad o fuerza. Requieren un control motor.
Estas habilidades se han desarrollado desde que los padres enseñaron a sus hijos a cazar, a coser pieles y a hacer fuego. Hay una rica historia en la educación profesional hacia el reconocimiento del desarrollo progresivo de habilidades, desde el aprendiz al oficial y al maestro (Perrin, 2017), que se remonta a la creación de los gremios artesanales en la Alta Edad Media europea (Richardson, 2005). A medida que los gremios artesanales aflojaron su control, a medida que la industrialización centralizó la producción de bienes y, en última instancia, de servicios, algunas habilidades se han perdido, otras se han dividido, segmentado, en una serie de tareas. La educación formal ha separado sistemáticamente las habilidades cognitivas y manuales, dando primacía a las habilidades intelectuales sobre todas las demás (Gardner, 2011).
Ejemplos de psicomotricidad en enfermería
La capacidad psicomotriz se refiere a una amplia gama de acciones que implican movimientos físicos relacionados con el procesamiento cognitivo consciente. La capacidad psicomotriz puede medirse por la precisión o la velocidad (tiempo de reacción). Algunos ejemplos de pruebas psicomotoras son la prueba del tablero de clavijas estriado y la prueba del tablero de clavijas de Purdue, que miden la coordinación visomotora. La prueba de golpear con los dedos requiere que los participantes en el estudio coloquen su mano dominante boca abajo y golpeen lo más rápidamente posible. La tarea se repite con la mano no dominante y evalúa la velocidad motora, la destreza manual y la lateralización. La prueba de sustitución de dígitos por símbolos consiste en emparejar números y símbolos. Se muestra a los participantes varios números y se les pide que escriban los símbolos correspondientes que faltan lo más rápidamente posible, midiendo la capacidad motora y la atención. La tarea motora de persecución del rotor presenta a los participantes un plato giratorio con un punto en el centro que deben sujetar con una varilla metálica flexible mientras el plato gira, lo que mide la coordinación motora y el aprendizaje. La tarea de trazado de estrellas en el espejo pide a los participantes que tracen una estrella mientras sólo miran su mano en el reflejo de un espejo, lo que evalúa el aprendizaje visual-motor.